La Policía Local de León sancionó ayer al propietario de un perro de raza Staffordshire Terrier por no usar bozal correctamente y dejar al animal desatendido. El suceso se produjo a las 11.50 horas en la calle Cardenal Cisneros, cuando una vecina requirió a la patrulla asegurando que había sido agredida por un perro que se encontraba atado con bozal no homologado y sin nadie a su cargo en un banco. Los agentes identificaron al dueño, que presentó la licencia de animales potencialmente peligrosos y como la cartilla de vacunación en regla junto al resto de documentación.
Además, los agentes retiraron ayer la tarjeta a una persona con movilidad reducida que se encontraba aparcado en un estacionamiento reservado en la calle Las Médulas sin estar autorizada para hacerlo.
Por otra parte, la Policía Local sancionó a las 18 horas a un conductor en la avenida Quevedo por conducir con un tasa de alcoholemia de 0,66 miligramos por litro en la primera y de 0,71 en la segunda. En otra intervención media hora después, los agentes realizaron las diligencias correspondientes en el Juzgado de Instrucción sobre un hombre por circular en la avenida de los Peregrinos sin haber obtenido nunca el permiso de conducir.
Finalmente, los efectivos municipales formalizaron una multa a un hombre que se encontraba por la calle Pérez Galdós, faltando el respeto a los agentes y no respetando las órdenes de los mismos.