El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, comprometió hoy un fondo dotado con 100 millones de euros para nuevas líneas de subvenciones específicas de la agroindustria. Con ello, dijo, se prevén más inversiones y otras actuaciones como distribución, transformación, comercialización, promoción, formación o cooperativismo.
El anuncio lo realizó durante el acto de inauguración de la ampliación de la fábrica de Cascajares, en Dueñas (Palencia), que ha supuesto una inversión de 1,2 millones de euros y permitirá aumentar en un 10 por ciento la plantilla. En este sentido, el jefe del Ejecutivo remarcó que la Junta de Castilla y León intensificará el apoyo a la industria agroalimentaria “porque aprovecha los recursos de la Comunidad, crea empleo y fija población en el mundo rural”.
Además de este paquete de medidas para respaldar esta actividad, Mañueco recordó también el impulso de políticas de innovación y de financiación, como el plan de crecimiento y consolidación de pymes, dotado con 200 millones de euros; el fomento de la incorporación de jóvenes y mujeres al ámbito agrario y agroalimentario; y el desarrollo de un fiscalidad inteligente y moderada que favorezca el mundo rural, con la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, que facilita la transferencia de empresas entre generaciones.
Fernández Mañueco se refirió, además, a la rebaja del suelo industrial titularidad de la Junta una media del 25 por ciento; la apuesta por la digitalización y por internet de calidad en todos los rincones de la Comunidad, y la promoción de la internacionalización de las empresas y el apoyo frente a la inestabilidad de los mercados.
En este sentido, Mañueco subrayó la «colaboración del Gobierno autonómico con la industria agroalimentaria, con una apuesta por una fiscalidad inteligente, moderada y favorable, al suprimir el impuesto de sucesiones y donaciones entre padres e hijos y facilitar así una sucesión empresarial”. También recalcó la importancia de los mercados globales, “en unos momentos de voces críticas con Europa”, por lo que ratificó el compromiso con el continente, “no solo como destino de los productos, sino también como una Europa de garantía y seguridad frente a la inestabilidad de mercados y guerras comerciales”.
En este sentido, el presidente abogó por el viejo continente como destino de los productos agroalimentarios de Castilla y León y como garantía de fortaleza en mercados exteriores. Manifestó que es fundamental para el futuro de los agricultores y ganaderos que reciben las ayudas de la PAC y ha garantizado que el Gobierno de la Comunidad defenderá los intereses del campo de Castilla y León.
Todo ello, según prosiguió Fernández Mañueco, en un entorno político y social estable y desde el diálogo constante y la colaboración con las organizaciones agrarias, a las que, según ha afirmado, siempre van a escuchar. Finalmente, indicó que, “con el empuje de los emprendedores y políticas de apoyo adecuadas, la industria agroalimentaria está llena de oportunidades”.
Cascajares, una industria en expansión
Mañueco inauguró la ampliación de las instalaciones de Cascajares en Dueñas (Palencia), que ha contado con el apoyo de la Junta por distintas líneas y programas. Esta fábrica factura 15 millones de euros al año, de los que dos tercios proceden del exterior, de Europa y Canadá. El presidente aseguró que esta firma es un “ejemplo a seguir por todos los que quieren hacer bien las cosas” a través de una empresa “»arraigada en el territorio”, dado que “gran parte de los trabajadores proceden de las tierras del Cerrato».
Ha sido también fundamental en este éxito el trabajo de los grupos de acción local, según subrayó Fernández Mañueco, quien apuntó que los 44 que existen en la Comunidad realizan una labor esencial en el desarrollo rural y la creación de empleo.
El presidente ha declarado que Cascajares ejemplifica la pujanza de la industria agroalimentaria, que representa el cinco por ciento del PIB de la Comunidad y da empleo a 37.000 personas, siendo la tercera más importante de España por volumen y la primera en productividad.
Igualmente, Declaraciones que realizó durante una visita a la nueva ampliación de la fábrica, donde Mañueco destacó que “con esta nueva zona se va a crear más empleo y actividad”, quien apuntó que Cascajares es “un ejemplo que demuestra que el medio rural es capaz de generar oportunidades y de conquistar el mundo a través de una política cercana y comprometida”.
El máximo representante de la Junta afirmó que es una empresa localizada en el medio rural “consciente de la importancia de abrirse a mercados internacionales, ya que las dos terceras partes de su producción van destinadas a las exportación”.
También alabó la colaboración público-privada, ya que “sin el apoyo de la Junta de Castilla y León hubiérais conseguido muchas cosas, pero con el apoyo de la Administración pública se han conseguido muchas más cosas y llegar más lejos”. Una apuesta que se realiza por “la empresa familiar y la industria agroalimentaria al ser fundamental”, puntualizó.
Nuevas instalaciones
La ampliación, con un coste de un millón de euros, se ha centrado en la construcción de una nueva planta donde se ha centralizado toda el proceso de empaquetado. Desde Cascajares aseguraron que con ella se pretende hacer frente al aumento de la demanda de las campañas navideñas y el mercado retail.
Además, en esta nueva nave se ha introducido una máquina de rayos X con la que se duplica el sistema de seguridad alimentaria. A mayores del detector de metales, esta máquina