Efectivos de la Guardia Civil investigaron a una persona, cuyas iniciales son C.F.S., de 28 años de edad, como presunto autor de un delito contra la fauna y la flora por la muerte de dos cuervos en Las Merindades (Burgos), según informaron hoy fuentes de la Benemérita. La necropsia practicada a los córvidos demuestra la presencia de cinco y dos impactos de perdigón en cada ave. Una inspección a una explotación agrícola permite localizar, dentro de un todo terreno, una carabina de perdigones y munición del calibre 4,5 milímetros.
Los hechos se observaron días atrás con motivo de una inspección por parte del Seprona a una explotación ganadera ubicada en Las Merindades, en el marco de los servicios preventivos dirigidos al control de la mortalidad no natural de especies y al uso de medios de caza prohibidos. En el exterior de la granja dedicada al vacuno se encontró un vehículo todo terreno. En su maletero se encontró los cadáveres de sendas aves, por lo que se requirió la presencia del titular en el lugar, que fue identificado.
Ambos ejemplares presentaban a simple vista orificios en entrada en la cabeza que casaban con los producidos por el impacto de un perdigón de plomo o similar. En el asiento correspondiente al lugar del copiloto se halló una carabina de aire comprimido del calibre 4,5 milímetros, con su correspondiente numeración, y en la guantera una caja de perdigones del mismo calibre.
El dueño no pudo acreditar su lícita tenencia al carecer de la documentación necesaria, la Tarjeta de Armas expedida por el Ayuntamiento correspondiente, por lo que fue intervenida junto con la munición. Los cuerpos de los córvidos fueron entregados en el Centro de Recuperación de Animales Salvajes de Burgos, donde la necropsia practicada ha facilitado que presentaban cinco y dos impactos de perdigón, respectivamente.
Estos claros indicios demuestran, aseguraron las citadas fuentes, la muerte de forma violenta mediante disparos de carabina de aire comprimido y que la acción de capturar o abatir a ejemplares de cuervo está prohibida infringiendo además los criterios establecidos en la Ley de Caza de Castilla y León.