La consejera de Sanidad, Verónica Casado, alertó hoy de que, con el paso de las semanas y por los efectos de la vacunación, Castilla y León registra una nueva tipología de contagios que afectan cada vez a población más joven, con un promedio de edad por Prueba Diagnóstica de Infección Activa (PDIA) que se sitúa en los 42,8 años, tanto en el mes de marzo como en el de abril.
Lo dijo en su comparecencia ante la Comisión de Sanidad de las Cortes de Castilla y León para explicar la situación epidemiológica en la Comunidad por el COVID-19, donde precisó que a medida que avanza la vacunación, cada vez se registran menos positivos entre los grupos con mayor edad, de modo que en estos momentos la positividad media entre los de 80 y 89 años es de un 7,63 por ciento, y entre los mayores de 90, en el 3,82 por ciento. Mientras, en entre los grupos de 40 y 49 y 50 y 59 años está en el 15,12 y el 15,91 por ciento, en cada caso.
Entre la población de 70 a 79 años años está también por debajo del ocho por ciento, un 7,91 por ciento, lo que, a juicio de Casado, es positivo porque se están viendo los efectos de las vacunas, y porque la positividad marca la evolución de la incidencia.
Búsqueda de variantes de COVID-19 más agresivas
Castilla y León es la segunda comunidad que más secuenciaciones está haciendo en búsqueda de nuevas variantes del COVID-19 que puedan ser más agresivas, hasta el punto de que secuencia un 11,35 por ciento del total del país.
Así lo explicó hoy la consejera de Sanidad, Verónica Casado, en su comparecencia ante la Comisión de Sanidad de las Cortes de Castilla y León para explicar la situación epidemiológica en la Comunidad por el COVID-19.
La consejera recordó que en estos momentos la variante británica sigue siendo predominante y aumenta su presencia en nuestra Comunidad. En concreto, tiene una penetración del 95,23 por ciento.