La Junta de Castilla y León aprobó destinar 68.656 euros en el yacimiento celtíbero y romano de Numancia, un importe que irá destinado a la campaña de excavaciones, restauración de materiales cerámicos, adecuación del área pedagógica y mantenimiento de estructuras y espacios reconstruidos en el yacimiento. Además se contará, al igual que el año pasado, con un campo de trabajo.
Para los trabajos que dirige el profesor Alfredo Jimeno y que se centrarán en la manzana XXIV con el fin de documentar la urbanística celtibérica de la Numancia destruida por Escipión, la inversión prevista es de 17.966 euros.
El objetivo es continuar, en la próxima campaña de este verano, la excavación de la manzana (unos 400 metros cuadrados) para delimitar con precisión la misma y conocer su compartimentación general con el fin de hacer la determinación de muros y estructuras a localizar y conservar.
Además, se investigará también la distribución interna de la manzana romana y celtibérica, la diferenciación de casas y patios, la organización interna de los espacios domésticos, discriminación de tiendas y talleres, entre otros.
Además, se pretende controlar las características estratigráficas, tratando de constatar los niveles de la ciudad romana, el nivel de la ciudad destruida en las Guerras Sertorianas y conocer su estructura, así como el nivel correspondiente a la ciudad destruida en el 133 antes de Cristo
En esta campaña se propone rematar la aportación del nivel de la ciudad celtibérica de época sertoriana para alcanzar el nivel de la ciudad celtibérica destruida por Escipión en el 133 antes de Cristo, de la que se tienen indicios por la información que ha aportado el nivel celtibérico de la manzana contigua.
En el verano de 2018 se descubrió, por debajo del nivel de la ciudad romana, la ciudad celtibérica destruida en época sertoriana por Pompeyo (75-72 antes de Cristo). La excavación fue muy fructífera, ya que además de documentar las características de la ciudad una de las casas proporcionó en dos de sus estancias una gran acumulación de cerámicas, aplastadas por la caída de sus techumbres. Una de ellas estaba repleta de grandes vasijas monocromas de almacenamiento, y la estancia colindante llena de jarras, copas, cuencos, bock y otras, que todavía no han sido diferenciadas por el amontonamiento y rotura de las cerámicas.
En la actualidad, el Centro de Restauración de Bienes Culturales de la Junta de Castilla y León restaura un grupo de casi 30 cerámicas monocromas halladas en la manzana XXIV del yacimiento de Numancia en las campañas de 2017 y 2018. Para este trabajo, la Junta de Castilla y León contrató un restaurador especializado en cerámicas, con un presupuesto de 15.600 euros.
El objetivo de esta intervención es doble: que las piezas puedas ser expuestas en el Museo Numantino y que los investigadores estudien las mismas con una mayor facilidad.
Estas inversiones en Numancia se complementan con las ya adjudicadas por la Junta, a la empresa soriana de arqueología experimental Areco por un importe de 35.090 euros, para el mantenimiento de estructuras y espacios reconstruidos entre los años 1999 y 2000 (una casa romana, una celtibérica y dos tramos de muralla), con técnicas de arqueología experimental, para la presentación del yacimiento a los ciudadanos de la manera más adecuada posible.
Estas obras de adecuación y mantenimiento se verán acompañadas de otras intervenciones para mejorar los recursos didácticos y divulgativos del yacimiento, que en 2018 fue visitado por 48.162 personas.