La Junta Rectora del Parque Natural de la Laguna Negra y los Circos Glaciares de Urbión (Vinuesa, Soria) procederán a colocar en dicho espacio natural este verano, con motivo de la travesía a nado, una plataforma flotante para que los participantes salgan del agua a través de ella y no pisoteen los bordes del enclave. Una medida que persigue que el espacio sufra la menor presión posible, en aras a contribuir a la recuperación de su estado ecológico.
Desde hace cuatro años, este espacio natural sufre un episodio intenso de crecimiento algal que provoca la coloración verde del agua, lo que llevó a la puesta en marcha de una investigación para esclarecer sus causas y disponer de datos sobre el proceso de eutrofización.
La Junta de Castilla y León encargó un estudio para saber porqué se producía la eutrofización del agua a la empresa cántabra Ecohydrus, que incluyó una propuesta de medidas correctoras a implantar a corto, medio y largo plazo.
El director conservador del Parque, Óscar Carrascosa, explicó que, en primer lugar, se pretende proteger los márgenes de la Laguna, ya que está constatado que cuanto más se pisotea el espacio más se favorece la proliferación de algas.
“Con la pasarela que se consiguió para impedir el acceso directo al espacio se consiguió rebajar la presión pero hay actividades como la travesía a nado, que reúne a un buen número de personas, que requieren que se tomen medidas de protección”, dijo, para señalar que es un ecosistema “muy sensible y cada vez más, debido al cambio climático”.
En este sentido, recalcó que el pisotear el borde de la Laguna supone remover los sedimentos y que las algas que proliferan obtengan más alimento, y por ello, se controlarán los valores que producen la explosión demográfica del alga.
Además, de esta medida de protección de las márgenes se liberará la carga piscícola, debido a la población de cangrejos señal que fueron introducidos de forma artificial por los pescadores, ya que en su día la Laguna Negra fue un coto de pesca.
También se implementarán dispositivos de monitorización continuada que permitan avanzar en el seguimiento y predicción de los cambios de ecosistema y de las acciones correctoras que se ejecuten así como en el conocimiento de las relaciones causales.
Óscar Carrascosa indicó que el estudio determinó el cambio climático como factor importante en la eutrofización de la Laguna, y agregó que se detectó que cuando no se producen heladas severas en invierno, es decir que se dan temperaturas benignas no propias del ecosistema, aumentan las algas y con ello la fuerte coloración verde del agua.
Asimismo, precisó que el crecimiento intenso algal en este espacio no es solo propio de la Laguna Negra sino que también ocurre en otros espacios similares como en la Laguna de Peñalara en Madrid que presenta un color no propio debido, en este caso, principalmente a la acción humana (presión turística) y la contaminación.
Al margen de estas medidas, la Junta Rectora aprobará a medio y largo plazo un plan con medidas protectoras para recuperar el ecosistema y el estado natural del agua, que la empresa encargada del estudio de investigación planteará en los próximos meses.
Estudio de investigación
La investigadora de la empresa Ecohydros, Tamara Castillo, afirmó que existen indicios de que la Laguna Negra pueda estar sufriendo un cambio de estado trófico, a raíz de los episodios de crecimiento de fitoplancton observados en los años 2016 y 2017.
Asimismo, precisó que, a pesar de que no existe información previa sobre los macrófitos (plantas acuáticas) de la Laguna, la presencia del cangrejo señal es un reconocido factor de presión directa sobre los mismos, que contribuye también al enturbiamiento del agua por remoción del sedimento.
“Ambos factores hacen que haya más nutrientes en la columna del agua, disponibles para el crecimiento del fitoplancton. Cuando este crecimiento es desmesurado se producen esas intensas coloraciones verdes, que son preocupantes no solamente por su impacto visual, sino porque su frecuencia e intensidad son auténticos indicadores de degradación”, dijo.
Los escenarios de cambio climático van todos en la línea de agravar el problema, según la investigadora, ya que estimulan la eutrofización y el tránsito de la fase clara a la turbia en La Laguna, por lo que resulta necesario adoptar medidas correctoras.
El estudio concluyó que se deben implementar dispositivos de monotorización continuada que permitan avanzar en el seguimiento y predicción de los cambios del ecosistema y de las acciones correctoras que se ejecuten así como el conocimiento de las relaciones causales y también la realización de un control de peces y cangrejos.
Como actuación complementaria a las propuestas apostó por implicar en este programa de recuperación de la ecología de la laguna a la ciudadanía.
El estudio sirvió, además, para medir la profundidad máxima de la laguna que alcanza los ocho metros su profundidad máxima, es decir, que es de tipo medio.
La Laguna Negra, es una laguna de montaña originada por erosión glaciar de tipo circo con escasa fluctuación del nivel del agua a lo largo del año. Posee una superficie de 3,24 hectáreas y un volumen de 161 decámetros cúbicos. Su característica principal es la transparencia de sus aguas, singularidad que motivó su nombre.
El área en el que se ubica pertenece al Parque Natural de Laguna Negra y Circos Glaciares de Urbión, cuyo objetivo prioritario es conservar, proteger y mejorar sus valores naturales, flora, fauna, modelado geomorfológico y paisaje, preservando su biodiversidad y manteniendo u optimizando la dinámica y estructura de sus ecosistemas.